No olvides, que aunque estamos a mitad de agosto, seguimos en verano y es importante cuidar nuestros ojos. Unas buenas gafas de sol son una buena solución, si bien hoy vamos a hablar de cómo podemos prevenir determinadas patologías oculares.

Factores como las temperaturas elevadas, la exposición a la radiación ultravioleta, los aires acondicionados y el agua de las piscinas y del mar pueden contribuir al desarrollo de patologías oculares, a corto, medio y largo plazo.

Algunas de estas patologías son: infecciones, conjuntivitis, ojo seco, irritación, fotoqueratitis o quemadura de la córnea, cataratas y degeneración macular.

Por tanto aquí van algunos de nuestros consejos para estas últimas semanas del verano.

Las gafas de sol conviene usarlas siempre que estés expuesto al sol. En este sentido son aconsejables para niños y bebés.

Deben estar homologadas y te recomendamos que no las compres ni en la calle ni en los bazares, ya que muchas de ellas suelen ser falsificaciones y carecen de los filtros que retienen la radiación ultravioleta.

Por otra parte si habitualmente utilizas gafas graduadas por tener problemas de vista, tus gafas de sol deberían estar graduadas también.

La protección de los ojos puedes completarla con el uso de una gorra o un sombrero, para que siempre tengas sombra.

Insistimos que el uso de gafas de sol es importante, también en niños y bebés.

Evita las largas exposiciones al sol, pues no sólo pueden afectar a tu ojos, sino también a tu piel.

Aunque lleves tu gafas de sol puestas te aconsejamos no mirar directamente al sol.

Utiliza gafas de baño, tanto en la piscina como en el mar, para evitar el contacto con agentes irritantes y contaminantes, como son el cloro en las piscinas, o los virus y bacterias en el mar.

La semana pasada hablamos del aire acondicionado al hablar de los resfriados: el aire acondicionado reseca los ojos y es un problema que puede provocar el ojo seco.

Además si no se hace un mantenimiento de los filtros  y sistemas de ventilación se puede favorecer la aparición de infecciones.

Lávate las manos a menudo: si te frotas los ojos con las manos sucias es posible que sufras alguna infección. Es importante sobretodo en los niños y sus juegos en la playa.

Cuerpo extraños en los ojos. Si entra algún cuerpo extraño en los ojos, es importante no frotarse los ojos, y si lavarse con agua abundante de forma inmediata.

En definitiva siguiendo estos consejos, en estas últimas semanas del verano, utilizando una buenas gafas de sol, evitaremos gran parte de los problemas que afectan a los ojos durante el verano.

Si tus problemas persisten no dejes de visitar a un buen oftalmólogo.